El viernes 10 de agosto se presentará el libro «El anillo del Nibelungo» (obra original de Richard Wagner), traducido y analizado por Bernardo Moroder. Actuará dentro de la misma presentación, el Coro Estable de Tandil a cargo de la Mtra. Annele Moroder.
Bernardo Moroder
Nació en Baviera, Alemania, el 14 de mayo de 1943. Arribó al país en 1949 y se radicó en Tandil en 1954.
Fue director y fundador de Coros en Tandil y otras ciudades de la Provincia de Buenos Aires. En 1972 formó el Coro Estable de Tandil, que dirigió hasta el 2009.
Distinciones: Segundo Premio en el Concurso Nacional de Arreglos Corales, 1982; “Santa Clara de Asís” de la Liga de Madres de Familia, en 1992. Segundo Premio en los Encuentros Corales Bonaerenses en 1995, y en 1998 el Premio “Leonardo Da Vinci” del Círculo de Arte de Tandil.
Ha hecho traducciones del alemán al castellano de las óperas más importantes de Richard Wagner, como así también obras de otros compositores: Richard Strauss, Cantatas de J. S. Bach, Lieder de Schubert y Mahler, entre otras.
También ha realizado numerosas traducciones para el “Choral Bulletin” de la Federación Internacional para la Música Coral.
Fue docente de música entre 1978 y 2009
en las cátedras de Audioperceptiva, Historia de la Música y Dirección Coral.
Contratapa de «El anillo del Nibelungo»
«Cualquier oyente se recrea en un pensamiento diáfano, melodioso: cuanto más comprensible le sea todo, tanto más prendido quedará de ello». Richard Wagner
La obra fundamental de Richard Wagner es, sin duda la Tetralogía El Anillo del Nibelungo. La misma está compuesta por cuatro óperas, El oro del Rin, La Valquiria, Sigfrido y El ocaso de los dioses. Estas junto con Parsifal, Los Maestros Cantores de Núremberg, Tristán e Isolda, Tannhäuser, Lohengrin y El Holandés Errante componen el llamado Canon de Bayreuth, el catálogo de óperas que se representa en el festival que se celebra cada año desde 1876 en Bayreuth, Alemania, en el teatro que el propio Wagner proyectó y logró construir.
Wagner ha desarrollado en estas óperas un estilo propio basado en los llamados “Leitmotiv”, esto es “Motivos conductores”, pequeña células musicales que representan situaciones, estados de ánimo, personajes, lugares, etc. y que permiten al oyente ir reconociendo en la música la trama que va desarrollando el texto del canto. El que nuestras audiencias puedan comprender ese texto y seguirlo también en la música, es el motivo que ha llevado al autor a presentar estas traducciones acompañadas por los motivos musicales que las ilustran.